El café se vuelve una alternativa económica para tres municipios
En sólo un quinquenio, la producción de café se convirtió en una fuerte alternativa de ingresos económicos para 315 familias de los municipios de Buenavista, San Carlos y Yapacaní en el norte integrado de Santa Cruz. En la zona, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (Jica) impulsó el proyecto Café Amigable con la Naturaleza, que ayer cerró un ciclo de la ayuda nipona que demandó un financiamiento a fondo perdido de $us 1 millón.En la oportunidad, Toshiyuki Ezuka, representante residente de Jica en Bolivia, explicó que en el tiempo de duración del proyecto (cinco años) se logró aumentar el área de siembra de café de 20 hectáreas a 360, lo que al presente permite industrializar cerca de 100 toneladas de granos por año, de las cuales un 90% se destina a EEUU, Canadá, Holanda, Rusia, Suiza y Japón. El resto es para completar la demanda de Santa Cruz y La Paz.
En los cinco años de aplicación del programa, según Ezuka, se logró involucrar a 315 familias de Buenavista, San Carlos y Yapacaní que apostaron por la actividad cafetalera, y como resultado se tiene que el café se ha convertido en la tercera alternativa agrícola de producción en la provincia Ichilo, después de los cítricos y la ganadería. “El café que se obtiene en la planta de procesamiento Buenavista es de excelente calidad, además que cuenta con certificación internacionales a la calidad algo que es muy valorado en los países donde se exporta el café boliviano”, aseguró Ezuka.
En Ichilo, la Jica invirtió $us 1 millón en asesoramiento técnico a los productores, mecanización de la planta de procesamiento de café Buenavista y abrió mercados para que los productores de la región exporten su producción.
En torno al beneficio económico del proyecto, Widen Abastoflor, director ejecutivo del Centro de Promoción Agropecuaria Campesina (Cepac), entidad que operativamente acompañó el proyecto, señaló que el año pasado se logró exportar café con el sello Buenavista a mercados externos por un valor de $us 280.000.
Francisco Maldonado, en representación de los productores de café de la zona, señaló que la actividad cafetalera en la provincia Ichilo se ha convertido en un medio de vida para muchas personas.
Toneladas
Es la cantidad de grano que anualmente se procesa en la planta Buenavista. El 90% de la producción se destina a mercados externos, el resto se queda en el país Cafeteros
En los cinco años de ejecución del proyecto se logró involucrar a esa cantidad de familias. La mayoría vive en áreas rurales de Buenavista, San Carlos y Yapacaní. Paquete
Es el precio comercial promedio que alcanza una bolsa de 250 grs. en EEUU, Canadá, Holanda, Rusia, Suiza y Japón. En el mercado local el valor no supera los Bs 14
Superficie
Representa la extensión sembrada en la última campaña. Antes de que ingrese la Jica con el proyecto, en Ichilo se sembraba un promedio de sólo 20 hectáreas
En los cinco años de aplicación del programa, según Ezuka, se logró involucrar a 315 familias de Buenavista, San Carlos y Yapacaní que apostaron por la actividad cafetalera, y como resultado se tiene que el café se ha convertido en la tercera alternativa agrícola de producción en la provincia Ichilo, después de los cítricos y la ganadería. “El café que se obtiene en la planta de procesamiento Buenavista es de excelente calidad, además que cuenta con certificación internacionales a la calidad algo que es muy valorado en los países donde se exporta el café boliviano”, aseguró Ezuka.
En Ichilo, la Jica invirtió $us 1 millón en asesoramiento técnico a los productores, mecanización de la planta de procesamiento de café Buenavista y abrió mercados para que los productores de la región exporten su producción.
En torno al beneficio económico del proyecto, Widen Abastoflor, director ejecutivo del Centro de Promoción Agropecuaria Campesina (Cepac), entidad que operativamente acompañó el proyecto, señaló que el año pasado se logró exportar café con el sello Buenavista a mercados externos por un valor de $us 280.000.
Francisco Maldonado, en representación de los productores de café de la zona, señaló que la actividad cafetalera en la provincia Ichilo se ha convertido en un medio de vida para muchas personas.
Toneladas
Es la cantidad de grano que anualmente se procesa en la planta Buenavista. El 90% de la producción se destina a mercados externos, el resto se queda en el país Cafeteros
En los cinco años de ejecución del proyecto se logró involucrar a esa cantidad de familias. La mayoría vive en áreas rurales de Buenavista, San Carlos y Yapacaní. Paquete
Es el precio comercial promedio que alcanza una bolsa de 250 grs. en EEUU, Canadá, Holanda, Rusia, Suiza y Japón. En el mercado local el valor no supera los Bs 14
Superficie
Representa la extensión sembrada en la última campaña. Antes de que ingrese la Jica con el proyecto, en Ichilo se sembraba un promedio de sólo 20 hectáreas
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