Perspectivas para los cultivos de algodón


El algodón, materia prima de la humanidad, planta malvácea que data de muchos milenios y que sirvió a economías de antiguas civilizaciones como egipcia, hebrea, griega y que fue introducida en Europa por los fenicios y los árabes para luego convertirse en materia prima importante en América y otras regiones del mundo, tiene excelente contextura para la industria de textiles y de sus semillas se extrae margarina y muchos productos alimenticios de gran utilidad. Es importante la competencia en el mundo para conseguir altos índices de producción. En nuestro país se ha logrado algunos éxitos hasta la década de los años 70 para posteriormente declinar su producción.

Conjuntamente la soya, el maní, el girasol y otros productos agropecuarios, podría ser el algodón un excelente medio para alcanzar altos rendimientos económicos y ser, además, un medio diversificador de la economía. El cultivo en miles de algodonales de esta planta implica, además, asegurar un medio ambiente excelente para otros cultivos y su reemplazo a la lana de oveja y otros camélidos adquiere condiciones para sustituir a las fibras sintéticas que se logra del gas y del petróleo.

Cultivar algodón es objetivo primordial en muchos países y las regiones orientales de nuestro país, conjuntamente algunos valles y cabeceras de valle, con climas cálidos pueden adaptarse perfectamente a cultivos que no requieren grandes esfuerzos y cuya mecanización alcanza en el mundo altos grados de efectividad y rendimiento. Es para la ingeniería agropecuaria un renglón de especialización, que da lugar a una mayor incursión en labores agrícolas, no solamente de ingenieros agrónomos sino de profesionales medios que incursionen en otras actividades productivas de las áreas rurales.

En las políticas de desarrollo económico que el Gobierno podría adoptar, el algodón – materia prima de todos los tiempos y con grandes perspectivas de industrialización – podría ser un rubro importante que debería encararse mediante apoyos y campañas sustantivas para empresarios, campesinos agropecuarios, sindicatos agrarios, cooperativas, etc. que buscan mejorar sus ingresos e incursionar en las exportaciones porque hay mercados permanentes y con precios muy altos registrados en las bolsas de valores.

El algodón puede convertirse fácilmente, y con muchas ventajas en relación con otros productos, en materia que sustituya a la coca; es decir, ser un elemento más que fortalezca los cultivos alternativos de la hoja; en otras palabras, un medio más para combatir al narcotráfico empeñado en incrementar cultivos de coca para acrecentar la producción de droga. Los algodonales, en todo caso, no interfieren los cultivos de cítricos, bananos, palmitos, café, pimienta y otras especies necesarias no sólo para la industria textilera sino también alimenticia.

El Gobierno podría dar pasos en rubro tan importante y que no requiere de grandes esfuerzos humanos y financieros para conseguir alta producción. La actividad agropecuaria, hasta llegar a la industrialización, adquiere mucha importancia para cubrir los déficits de empleo que padece nuestro país. Es necesario no descuidar este rubro teniendo la capacidad de tierras aptas y climas propicios para hacer realidad cultivos de algodón que darían lugar a múltiples usos e implicaría beneficios alimenticios e industriales.

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