El Gobierno y el agro pactan para acortar trámite de exportación

El Gobierno ajustará sus tiempos para que el trámite que permita la exportación de granos se reduzca de un mes a seis días. La resolución biministerial sería puesta en vigencia en el transcurso de los próximos días, según adelantó la viceministra de Desarrollo Rural Agropecuario, Teresa Morales.

El Ejecutivo elaboró un reglamento para la exportación de maíz y soya de manera que el procedimiento sea más corto, es decir, que si duraba 15 a 20 días, ahora sea de seis o máximo siete días. “El documento ya está listo y el martes se sabrá desde cuándo estará vigente”, reveló.
Demetrio Pérez, presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), confirmó que hubo avances y espera resultados para esta semana. “Nos reunimos con el Gobierno porque el trámite es demasiado burocrático y le solicitamos que se reduzca de 30 a siete días”, aseveró.
Otro de los sectores afectados es el exportador. El titular de la Cámara de Exportadores de Santa Cruz, Ramiro Monje, señaló que la restricción a las exportaciones y los permisos para exportar se constituyen en una burocracia. “El permiso para exportar demora 30 días, hasta ahora no se vacían los silos y por ello no hay espacio para guardar los granos de la cosecha”, explicó.
Las trabas burocráticas hicieron que el maíz se acumule en los silos, lo que está afectando la cosecha.
Freddy Vaca, administrador de la planta de almacenaje Jihusa, reveló que el Gobierno tiene grandes cantidades de maíz y no las mueve, lo que afecta, a la capacidad de los silos.
Sobre este tema, en el Ministerio de Desarrollo Agropecuario indicaron que se está cuantificando el volumen que existe de maíz para ver qué medidas ejecutarán tomando en cuenta el precio, ya sea para el comercio interno como para la exportación.
Anapo adelantó que la demanda disminuirá
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) adelantó que la industria aceitera disminuirá la demanda de oleaginosas para la presente gestión.
Rolando Zabala, gerente de Anapo, indicó que cuando hablaron con la industria para la campaña de invierno, indicaron que comprarán menos girasol.
“Por las señales que dio la industria se sembrarán 210.000 hectáreas menos que el año pasado”, sostuvo.
El año pasado el girasol alcanzó una extensión de siembra récord de 302.000 ha, frente a las 213.000 ha de la campaña 2007.
Sobre la reducción de la demanda, se consultó a las empresas aceiteras, pero no contestaron hasta el cierre de edición, indicando que los gerentes estaban de viaje u ocupados.

http://www.eldeber.com.bo/2009/2009-06-01/vernotaeconomia.php?id=090531214539

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